Cuatro ideas de AMLO para el desarrollo económico
Está claro que en 6 años Andrés Manuel López Obrador no podría hacer cambios suficientes para lograr bienestar social y económico que todos quisiéramos. Es más, siendo realistas, existe la posibilidad de que demasiadas cosas permanezcan tal y como están. Sin embargo, en su gobierno se podrían sentar las bases necesarias que conduzcan al México que todos quisiéramos.
La economía mexicana está estancada desde hace 4 décadas. Los gobiernos anteriores han apostado, por presiones internas y externas, hacia una política económica que centra sus esfuerzos, principalmente, en atraer capitales extranjeros. México compite en el mercado internacional con “salarios bajos”, es decir, mano de obra barata. Todo esto vuelve más volátil e independiente a la economía nacional de situaciones globales. Esto es lo que han dejado gobiernos anteriores sometidos a intereses privados y a sus propios intereses.
Andrés Manuel lo sabe, no es gratuita su postura acerca de apoyar al mercado interno. Sin embargo, en su discurso no es incongruente, sabe también la importancia del capital extranjero en el país. Cuando fue jefe de gobierno de la capital del país, favoreció la inversión extranjera directa y fue el jefe de Gobierno que obtuvo la más alta inversión extranjera, desde Cuauhtémoc Cárdenas, sin dejar de lado otros problemas. Por esta y por otras razones, hasta este momento, los mercados no tienen una incertidumbre, fuera de lo normal, hacia el cambio de gobierno. Cabe señalar que en el debate realizado en Milenio, el pasado marzo a López Obrador, comentó sobre dejar de someterse a las “órdenes de Washington” en materia económica.
Ahora, como futuro presidente de México, AMLO puede sentar bases importantes si cumple con sus principales propuestas:
Combatir la corrupción
Está clara la relación inversa entre corrupción y bienestar social. Es ganancia, a cualquier nivel, que se combata. Por sí misma, representa uno de los grandes males de nuestro país y agrava otros tantos. Un ejemplo de ello es el famoso caso de Javier Duarte. No se sabe, a detalle, el total del monto que este personaje histórico desvió. Estimaciones apuntan que fueron cerca de 60mil mdp. Una cantidad exorbitante que pudo haberse reflejado en las calles y en programas sociales de Veracruz.
Todo esto sin tomar en cuenta lo que la corrupción por sí misma engendra.
No hace falta señalar porqué sería imposible que un presidente termine con toda la corrupción de todos los funcionarios públicos, el problema va más allá. Pero que el presidente de la nación centre esfuerzos en combatirla, es mucha ganancia.
Educación
La educación es uno de los pilares de cualquier país. No es fortuito que buena parte de la sociedad crítica provenga de las universidades. Se ha demostrado que una mayor educación y cultura reduce los niveles de violencia. Andrés Manuel ha prometido que a ningún joven se le negará acceso a la educación. Sin embargo, ésta tiene que ser de calidad. No bastará con construir nuevas universidades, además se tendrá que otorgar un mayor presupuesto a las principales universidades públicas del país.
La educación de calidad, por sí sola, garantiza una sociedad crítica y más consciente de su realidad. También garantiza un aumento en la capacidad productiva de un país.
Mayor gasto en inversión e infraestructura
Otra de las propuestas de López Obrador es un aumento en la inversión pública. Esto contribuye al mejoramiento de las vías de comunicación en el país. Se ha contemplado crear carreteras y trenes al sur, esto puede contribuir, en parte, a reducir la desigualdad de los estados. Una buena infraestructura es parte fundamental para un desarrollo económico. Una no podría avanzar sin la otra.
Incremento del doble en inversión en ciencia y tecnología
Ninguna nación puede ser competitiva solamente con mano de obra barata. Una economía en vías de desarrollo no puede siquiera pensar en convertirse en potencia si no invierte en educación, ciencia y tecnología. En el manual económico denominado pejenomics Andrés Manuel se comprometió a duplicar el presupuesto a ciencia y tecnología. Particularmente pienso que ésta es una de las bases más importantes para un proyecto de nación a largo plazo que saque a México de este letargo económico.
La ciencia y la tecnología traspasan a los productos de un increíble valor agregado. China, Japón y otros países asiáticos lo tienen muy claro. Es por eso que un incremento del gasto en este rubro tiene importantes consecuencias económicas.
En conclusión, son estos los 4 pilares que servirían de base para un cambio positivo, a mediano y largo plazo en nuestro país y que Andrés Manuel reiteró a lo largo de su campaña: mayor gasto en inversión e infraestructura, educación de calidad a la mayor gente posible, una menor corrupción y un incremento en el presupuesto asignado a ciencia y tecnología.