La crítica dentro de la 4T, necesaria para fortalecer el gobierno

Viendo la paja en el ojo ajeno

Osiris Israel Benítez Vasconcelos

El día martes 04 de junio, en este mismo portal, me encontré con el texto “Un problema llamado Hernán Gómez” de Fernando Martínez Flores. En ese escrito, el autor argumenta que el analista Hernán Gómez en realidad es un infiltrado de Televisa en la 4T. Para sostener su punto, retoma el debate que Gómez Bruera tuvo con el doctor John Ackerman en el programa del periodista Julio Astillero, del 05 de febrero pasado.

Recupera las críticas que hizo Hernán Gómez en un artículo publicado en El Universal llamado “Un problema llamado Irma Eréndira”, en donde señala la labor de la actual Secretaria de la Función Pública.

Fernando Martínez plantea que Ackerman “destrozó” los argumentos de Hernán Gómez en el programa de Julio Astillero. Asimismo, apela a la integridad de la Secretaria de la Función Pública con base en su formación académica tachando a Hernán Gómez como un simple difamador.

En primer lugar, discrepo del sr. Fernando Martínez Flores (de antemano me disculpo por no saber el grado académico del autor) con respecto al debate en el programa de Julio Astillero. Si tuviéramos la necesidad de declarar a un ganador como si fuera una pelea de box, mi tarjeta daría como ganador a Hernán Gómez por el hecho de que expuso sus argumentos sobre por qué Nicolás Maduro es un dictador, mientras el Dr. Ackerman sólo se dedicó a descalificar al Dr. Gómez por sus participaciones en la mesa de debate de Carlos Loret de Mola.

Bajo la lógica del Dr. Ackerman (y de diversos defensores de la 4T), el simple hecho de trabajar/colaborar con Televisa reduce la calidad moral y la credibilidad del colaborador. No se puede negar que la televisora no es bien vista por amplios sectores de la población, y que varios de sus periodistas han mostrado abiertamente una postura contra el presidente López Obrador (como Joaquín López-Dóriga); pero este tipo de análisis es demasiado escueto ya que no considera los diversos matices de la realidad.

Con respecto al asunto de Irma Eréndira Sandoval, no comparto del todo las conclusiones de Hernán Gómez. Considero que, aunque la Secretaria ha mostrado ciertas actitudes que no van con los valores de la 4T, el análisis de Hernán Gómez es demasiado aventurado. Sin embargo, no comparto tampoco los ataques hacia el Dr. Gómez Bruera. Es demasiado atrevimiento llamarlo “cobarde” y “títere” sólo por exponer algunos hechos que considera incongruentes con la 4T.

Conjuntamente, considerar como una virtud moral su trayectoria académica y los logros de su familia, es un argumento muy endeble. Si así fuera, diversos personajes de la esfera pública también deberían ser considerados como impecables.

En el texto ya mencionado, el autor concluye que la crítica al gobierno es un indicador de que se tiene una democracia sana, siempre que esté basada en argumentos y no en descalificaciones. Concuerdo con él, pero considero que cae en la misma dinámica que critica. Como dice mi madre: “es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio”.