Haz patria, compra unos PANAM
Consumir productos nacionales, hechos por manos mexicanas, es fundamental para lograr una economía fuerte, pues genera empleos en muchos niveles de producción y sin duda es una de las soluciones para activar la economía, fortalecerla y por qué no, crear identidad de consumo.
El consumo desmedido e inconsciente es una de las características de nuestra sociedad, por eso considero pertinente hablarles de una marca mexicana que en los últimos años se ha actualizado para nuevas generaciones. PANAM (Producto Auténtico Nacional Mexicano), como seguramente sabrán, hace tenis desde el año 1962 y su primer modelo fue el 084 “campeón”. PANAM se encargó de calzar a los niños y adolescentes de las décadas de los setenta y ochenta principalmente.
En los años ochenta llegaban productos nuevos al país por medio de los chiveros que traían fayuca, pero eran difíciles de conseguir y más caros, evidentemente y en los noventa con el TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte) llegaron marcas y productos que provocaron una fuerte tendencia de moda dejando a PANAM
fuera de la comercialización.
Sin embargo, PANAM ha sabido mantenerse en el mercado compitiendo con marcas como Nike, Adidas, Reebok, Puma y más, sin publicidad, buena calidad y precios bajos. Aunque esto parezca un comercial a PANAM, no lo es, sólo pretendo acercarlos(as) a una empresa 100 % mexicana que fabrica tenis de gran calidad con materiales 100 % mexicanos cuya fabrica emplea de 600 a 1000 trabajadores dependiendo de la temporada de los cuales 70 % son mujeres mexicanas y producen entre 4000 y 4500 tenis al día.
En la página oficial de PANAM dice “Nuestros productos trascienden las clases sociales”, eso según yo, fue verdad hasta antes de los años noventa, pues como ya dije, fue en esa década cuando entraron otras marcas con las que, por lo menos, creció mi generación. También dice “¿quién no ha usado unos PANAM alguna vez?” y respondo diciendo: yo
no. Debo confesar que no conocía los tenis PANAM hasta hace unos años, pero por pensar en los beneficios que conlleva comprar productos mexicanos me he animado a conseguir mi primer par y gastar mucho (mucho) menos que al comprar unos de cualquier otra marca.
¿Ustedes han tenido alguna vez unos PANAM? Si su respuesta es no, pregúntense cuál es la razón por la que compran tenis en 1000 pesos y no unos mexicanos en la mitad de precio o menos. Alejémonos de la vanidad, del consumismo desmedido. Dejemos de pensar que las
marcas extranjeras son mejores y dan categoría, porque “qué perro oso traer unos PANAM; que sólo los traen los nacos, los pobres y los que no tienen buen gusto”.
Ellos, los que siempre han usado PANAM son los que pueden presumir de cierta autenticidad. Son las tribus urbanas que gran parte de la sociedad rechaza y discrimina. Si comenzamos a pensar en los beneficios del consumo local y menos en lo que la mercadotecnia nos dice que pensemos, tendríamos unas sociedad menos clasista y más
auténtica, algo que PANAM dice hasta en su nombre y ha buscado colaborar con otros interesados en crear una identidad mexicana (unámonos). No juzguemos algo bien hecho, algo que genera beneficios para nuestra comunidad y sí, subámonos al tren de lo bien hecho en México. Seamos más conscientes en lo bueno que tiene usar PANAM y menos en la vanidad.