Falso que panistas y priistas lo harían mejor que la 4T

Carlos Alberto Ayala Correa

El calderonismo intenta aprovecharse de la crisis

Es falso que Felipe Calderón lo habría hecho mejor, pues no se puede comparar la crisis sanitaria que le tocó enfrentar a él en 2009 con la Influeza A H1-N1, que con la pandemia del Coronavirus, ya que la actual es mucho más agresiva, de mayor alcance internacional, más letal y una cepa de mayor duración. Aquella vez, Calderón optó por el cierre inmediato de las actividades durante dos semanas, por lo que no hubo gran afectación económica, además de que el contagio se centró en México, el cual se pudo superar rápidamente. El caso de Covid-19 es muy diferente, pues la cúspide de la curva de contagio será hasta en cuatro meses.

Contexto

El gobierno de la 4T se encuentra hoy más que nunca ante retos económicos y sociales que trascienden a la esfera nacional. La crisis económica mundial, combinada con la emergencia nacional por el fuerte impacto en la salud que ha dejado la pandemia del Covid-19 (coronavirus), y los inminentes efectos económicos derivados de la caída en los precios del petróleo, han dejado en evidencia la debilidad institucional en materia económica y de salud pública que, como herencia, nos dejaron los gobiernos neoliberales del PRI y del PAN en los últimos 30 años.

Nadie en su sano juicio puede añorar aquellos tiempos en que los gobiernos, bajo el velo de la corrupción, erosionaron profundamente la democracia mexicana. Basta con revisar los principales indicadores que hablan ello: de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (CONEVAL, 2018), en México hay 52 millones de pobres los cuales representan el 41% de la población total; 61.1 millones de personas tienen ingresos inferiores a la línea de bienestar, es decir, casi el 50% de los mexicanos no ganan lo suficiente para adquirir los bienes y servicios básicos;  y qué decir de los servicios de salud, hay poco más de 20 millones de mexicanos que no tienen acceso, o de los que no cuentan con seguridad social, que representan 57.3% de la población total (y eso sin hablar de la calidad de los servicios de salud). Carajo, con esas condiciones por supuesto que hacerle frente al Coronavirus será todo un reto y, sin embargo, la 4T está haciendo un buen papel.

Seis razones

1- Peña Nieto o Felipe Calderón ya hubieran endeudado aún más al país comprando millones de cubrebocas de mala calidad o pruebas de detección rápidas, pero pensando en el negocio con alguna empresa privada. Harían lo que siempre han hecho; pensar sexenalmente y no a largo plazo, apostar por el endeudamiento y heredar los problemas al siguiente gobierno.

2- Porque si hoy tenemos un sector salud en condiciones de baja calidad y en descomposición, es por responsabilidad precisamente de esos últimos gobiernos panistas y priistas.

3- Porque la única institución para enfrentar realmente y con eficacia a las pandemias, es el Estado social. Además de que en este momento, no existe otra forma de reactivar la economía más que con la intervención estatal. Y quienes se encargaron de erosionar, limitar y dilapidar el Estado mexicano, fueron precisamente los gobiernos neoliberales panistas y priistas.

4- Porque es fundamental, para enfrentar una crisis de esta naturaleza, el apoyo popular, la credibilidad del mandatario, la confianza de la sociedad con el gobierno, la legitimidad de las políticas públicas; algo de lo que han carecido los gobiernos priistas y panistas desde hace décadas.

5- Porque hubieran puesto en puestos clave (Secretarías de Estado) a sus amigos y conocidos, no a verdaderos expertos como el caso de lópez-Gatell. Pues como acaba de decir AMLO en la presentación de su plan de reactivación económica: “se ha escogido a los expertos en el tema, un político no es sabelotodo.”

6- Por su grotesca corrupción y porque Peña Nieto es un inútil, que lo único que le interesó fue salir corriendo a su exilio paradisíaco, y Felipe Calderón un ambicioso vulgar, que sólo está intentando aprovecharse de la actual crisis, deseando ver miles de muertes por la pandemia y poder salir a vendernos su absurda idea de que él supo enfrentar mejor la crisis de la Influenza A H1-N1, y promover así a su esposa como candidata para el 2024.

Está en juego la salud de cientos de mexicanos, pero también se encuentra en juego la salud de la economía nacional, condición necesaria (más no suficiente) para hacerle frente a los persistentes problemas sociales que se han heredado administración tras administración, tales como la desigualdad, la pobreza y la precariedad laboral.

Texto sugerido: No son tiempos de depresión, sino de templanza; AMLO