Doña Irma rechaza recompensa de dos millones
Un caso de verdadero ejemplo cívico. Una mujer con bajos recursos económicos, que decidió denunciar a los responsables del secuestro, violación y asesinato de la menor de siete años, Fátima, y que a pesar del miedo que ahora ha denunciado, por posibles represalias, rechazó la recompensa de dos millones de pesos que había ofrecido la policía para encontrar a los culpables del caso.
Ante la periodista Carmen Aristegui, doña Irma Reyes comentó: “Estamos para servir a la sociedad ante todo”. Con esa frase inició la narración de los hechos de cómo es que hizo confesar a Gladis Giovana, esposa de Mario “N”, quienes asesinaron a la menor de 7 años, Fátima, confrontándolos y diciéndoles que se tenían que entregar a la policía.
“Así fuera mi hijo, soy mujer, fui violada, tiene que haber justicia, no tiene que quedar esto impune, yo no quiero lucrar, sólo quiero que se haga justicia”, señaló en una entrevista con el noticiero Telediario.
De todas las escenas que doña Irma describe, una de las más dramáticas fue cuando los reunió a los dos para que confesaran su crimen, y les dijo: “abrácense fuerte, pues no se van a ver en mucho tiempo”.
Doña Irma también ha denunciado que se insegura, con miedo a represalias. Esperemos que no pase a mayores.
Ana María Canseco Dávila
Un ejemplo de civilidad de valor y sobretodo una gran mujer que se quiere, y respeta la vida de los demás de un corazón tan grande y que su estatus no le impide brillar y abogar por la tranquila de nuestras mujeres y por ella misma gracias por ser mujer valga la redundancia