Gato con Lentes

Alex Delarge: El Hombre de la Naranja Mecánica


31 mayo, 2022 @ 6:53 am

Alex Delarge: El Hombre de la Naranja Mecánica

Cecilia Marina Vázquez Vega

…” There was me. That is Alex and my three droogs, that is Pete,

Georgie, and Dim, and we sat in the Korova Milkbar trying to make up our rassoodocks what to do with the evening.

The Korova milkbar sold milk-plus, milk plus vellocet or synthemesc or drencrom, which is what we were drinking.

This would sharpen you up and make you ready for a bit of the old ultra-violence.  

 

Alex Delarge es el personaje que emerge tras el segundo 45 de la cinta de Stanley Kubrick titulada “La Naranja Mecánica”. Este filme está basado en la novela de Anthony Burgess del año 1962. Tras siete segundos de profundas respiraciones, la cámara se aleja del personaje centrando la toma directamente a su rostro.  Alex mantiene la mirada, profunda, completamente fija, directo al foco central de la cámara. El personaje da un trago del Moloko Vellocet, bebida integrada a base de leche, barbitúricos, anfetaminas, entre otros “plácidos” compuestos, que le darían el poder de la Ultraviolencia.

NEUROBIOLOGÍA DEL ESTRÉS

La exposición continua al entorno en constante cambio, reactivan nuestro sistema cerebral formado por sus tres subsistemas: límbico, reptiliano y neocorteza (Seijo, C.; Barrios, L., 2012). Cada uno de estos sistemas tendrá distintas interpretaciones del entorno. Con ello, la toma de decisiones se verá inmersa en filtros de manejo de la información que darán como resultado una respuesta a dichos estímulos. El proceso de análisis de la información generado en cada subsistema, guiarán al sujeto hacia una respuesta dado en la acción o en la indiferencia a un hecho. (Seijo C.; Barrios, L. 2012).  De tal forma, tenemos que dentro del sistema reptiliano o complejo R, se relaciona íntimamente con las rutinas y comportamientos básicos del animal humano. Es decir, abarca la saciedad de las necesidades vitales de sobrevivencia y homeostasis tales como búsqueda de alimento, descanso, defecar, orinar, libertad de espacio, reproducción, regulación del ritmo cardiaco, presión sanguínea, contracción de los músculos, entre otras actividades (Seijo, C.; Barrios, L. 2012). Es así como la fisiología de la especie buscará mecanismos endógenos para continuar realizando las actividades del día a día con el fin de mantener una autoregulación del organismo, es decir, la vida misma.

Considerando que lo único constante es el cambio, cualquier tipo de alteración al estado homeostático de la especie, generará un estrés inminente, provocando una liberación de neurotransmisores asociados al cuadro de estrés (adrenalina, noradrenalina, cortisol, dopamina, entre otros). Todo ser biológico con un sistema nervioso que integre los tres subsistemas, la fisiología del estrés estará asociada al síndrome general de adaptación. Si bien la única forma en la que los animales humanos pueden sobrevivir a la depredación constante del entorno social es por medio de la adaptación física y emocional. Para ello existen mecanismos evolutivos en los cuales el control de las conductas, vagamente clasificadas como instintivas, permiten que el organismo genere resiliencia durante el tiempo de vida. Dentro del sistema límbico las acciones estarán orientadas en las condiciones de emociones en las cuales la asociación de experiencias previas registradas en la memoria del individuo, permitirán un camino en el cual se ejecuten acciones con una previsión de lo que podría ocurrir de acuerdo con un condicionamiento previo. Sin embargo, el animal humano es el único animal en la especie que vuelve a tropezar con la misma piedra. La capacidad de asociación entre las experiencias y las acciones dadas por el recuerdo, implican un espacio de reflexión, en la cual el sistema neocortical toma el mando desde el abordaje intelectual. El sistema neocortical es el filtro principal de las ideas desde un pensamiento secuencial y lógico. Su estructura anatómica abarca el hemisferio derecho y el hemisferio izquierdo. El primer hemisferio está asociado con la inteligencia asociativa, donde los pensamientos estarán generados desde las emociones. De tal forma que el hemisferio izquierdo se relaciona con la capacidad racional, la forma lógica del “Si… entonces…” (Beauport, 2008).

TEORÍA ACTIVA DE LA BÚSQUEDA DE SENSACIONES

El sistema dopaminérgico mesocorticolímibico, es la zona en la cual el sistema de recompensa y autoestimulación cerebral libera adrenalina, noradrenalina y serotonina (Smilie y Wacker, 2014). Diversos estudios han dado respuesta a las posibles causas por las cual la adicción a secreción de la dopamina y adrenalina, son por la búsqueda de sensaciones extremas, codependencias, actos delictivos, adicciones a sustancias psicoactivas, relaciones de riesgos, deportes extremos, entre otros (Alcázar, 2008). La patología social del individuo, está estrechamente relacionada con esta teoría, debido a que durante la adolescencia, se genera un cambio transicional de adaptación donde los receptores dopaminérgicos D1 y D2 se ven incrementados durante esa etapa, lo cual hace que los jóvenes busquen actividades que generen la liberación intrínseca de dopamina de formas socialmente perjudiciales para ellos (Andersen et al., 2000; Benes et al., 2000). Finalmente está búsqueda de sensaciones se generan desde el complejo reptiliano, que se relaciona íntimamente con las conductas impulsivas donde el uso de la razón queda bloqueado hasta un grado de extraversión y psicosis.

Dentro de este ámbito, la explicación biológica se queda sólo en el plano reduccionista, debido a que existen multiplicidad de factores que inciden en los actos de una persona que no solo tienen que ver con la genética o la biología misma. El entorno social radica de forma trascendental, debido a que la constante depredación, la adaptabilidad a circunstancias de un entorno así como eventos intolerancia a la frustración, provocan una irritabilidad en el sistema social. Además que este complejo de resistencias y adversidades sociales, hacen que la persona genere una apatía y un comportamiento antisocial. Es por ello que estos comportamientos se verán estrechamente relacionados con una desintegración del tejido social por medio de robos, asaltos, violación a los derechos humanos, guerra y luchas de poder que sólo generan manifestaciones de egos autoritarios.

ALEX DELARGE: ANÁLISIS DEL PERSONAJE

Alex Delarge, es un joven que se realiza la mayor parte de sus actividades durante la noche.  Su entorno familiar denota la indiferencia de él hacia sus padres. El señor Deltoid es un elemento fundamental, debido a que es el respaldo constante por el cual varias veces facilitó asumir la responsabilidad de sus actos. Su vida académica está truncada así como la facilidad que tiene ante la creación de la mentira, sin responsabilidad de sus actos. El personaje se reúne con sus compañeros en un bar donde la bebida que los conduce a la Ultraviolencia, está basada en un coctail poderoso de sustancias psicoactivas que los invita a una seducción de actos delictivos. Alex denota ser un líder nato, autoritario, con una posibilidad de ejercer su poder sobre los demás personajes que lo rodean. La madre y el padre viven en la pasividad total. Reflejan la nula autoridad, el miedo y el frágil vínculo de gobernabilidad donde el verdadero tirano es Alex, que impone sus deseos. El día a día del personaje, coloca a Alex en situaciones continuas de generación de liberación de estrés tales como la velocidad en el auto y el no respeto a los límites sociales en su propia jauría.

La identificación de las distintas acciones del personaje durante la película permite tener un amplio panorama de las posibles causas de su trastorno de antisocial para desenvolverse de forma efectiva con su entorno. Delarge muestra ser un culto en la música clásica. Sin embargo, denota la poca capacidad de crear lazos afectivos con otras personas, puesto que con los animales tuvo la empatía de cuidar y preguntar por su serpiente en el momento en el que es confinado en la clínica para su “tratamiento”. Este personaje tiene cualidades como la astucia para realizar sus actos delictivos, sobre todo en el hecho de saber escoger a sus víctimas, el plan de cómo llevarían a cabo la invasión del espacio, la lucha contra las otras bandas de jóvenes, entre otras circunstancias. Sin embargo, la poca capacidad de lazos sociales que tiene, lo dejan totalmente solo y traicionado por su propio grupo. La adicción constante de descargas de adrenalina lo llevan a la inhibición de la propia razón. Un ejemplo claro es en el momento en el que asesina a la maestra de yoga, donde la impulsividad de sus actos le nublan completamente su vista para cometer el feminicidio. Una vez que se percata del hecho además de la trampa en la que cae por parte de sus compañeros, lo llevan a una serie de conflictos sociales en la que ya no existe ni siquiera la negociación de su propia libertad.

Durante el momento en el que Alex es internado para la aplicación de tratamiento Ludovico, se visualiza que el conductismo está estrechamente relacionado para su recuperación. Desde el propio hecho de aniquilar una conducta socialmente reprochable, por medio de la aplicación de un condicionamiento tan básico como los estudios de Pavlov. Al principio, Alex no demuestra ningún tipo de arrepentimiento por las acciones que comete. Su vida gira en torno a un ambiente de inconciencia, sin miedo y sin culpa alguna de sus propios actos, pero sobre todo una irresponsabilidad sin compromiso propio de crecimiento o madurez. A lo largo de la película, el personaje va teniendo diversos conflictos, asociación de nuevas ideas desde lo Bíblico, los correctivos dentro de la prisión, el tratamiento especial en el cual es sometido así como al momento de su reinserción social, el personaje no sabe como asumir la forma en la que ya es rechazado por su familia, la venganza de sus compañeros e incluso del anciano al cual sometió a su posición de poder en el momento en que él estaba subordinado a su enfermedad, el alcoholismo.

ANÁLISIS SOCIAL DE ALEX DELARGE

El contexto social es uno de los principales elementos para poder asociar una condición biológica (Meneses M., Monge, M. 1997). No podemos deslindar las anomalías sociales desde un concepto tan reduccionista desde las ciencias biológicas, debido a que existe una razón intrínseca del ser humano dado a las estructuras políticas, sociales y ambientales en las cuales se desenvuelve. La Naranja Mecánica refleja la hipocresía de una sociedad que está enajenada de acuerdo con un contexto específico donde están dando respuesta desde el propio libertinaje y la toma de justicia desde sus propias manos, así como la ciencia especifica que la respuesta será a través de los estudios y la manipulación de los tratamientos psiquiátricos imponiendo su poder en el nombre de la ciencia. Desde a crítica social, podemos determinar que incluso el principal representante de justicia, en este caso la policía, ejerce su privilegio de poder para “mantener el orden” desde una perspectiva y determinación de doble moral cuando Alex es golpeado. Sin embargo la crítica desde el punto de vista desde que él había traicionado desde un inicio a sus compañeros podría poner en duda las acciones de la propia policía. Todos los personajes el encargado de la cárcel, el señor Deltoid, el escritor que en los actos de violencia de Alex deja con la discapacidad motriz, ejercen una tortura pasiva desde el momento en que Alex está siendo víctima desde una venganza totalmente “justa”. Violencia caótica juvenil que genera una violencia institucional desde los propios organismos de representación ciudadana. Todos representan al Estado desde una figura pulcra, activa, conciliadora de conflictos. En este caso el gobernador, que soluciona los conflictos por medio de enmascarar la realidad de su desinterés total de una sociedad ecuánime, debido a que somete a Alex a un tratamiento de salud completamente antiético provocando incluso el intento de suicido. En ella genera una representación específica que solamente responde a los intereses del propio gobierno, la imagen pública.

Finalmente tenemos que a consecuencia de todos los actos que Alex comete, su falta de tolerancia a la frustración e incluso el sometimiento del tratamiento en el cual se encausa su recuperación, reflejan con las últimas palabras del personaje “I was cured alright” bajo un fondo de libertinaje y expresión sexual desde sus impulsos previos. La nueva imagen la cual Alex convierte sus actos en una vanagloriada actitud de recuperación de su propio ser individual, de su ser delincuente, de su ser patológico.

CONCLUSIONES

La toma de conciencia de las decisiones que se toman día con día puede causar un conflicto interno. En ello debemos saber discernir lo que queremos, lo que es necesario y la propia mediación de recursos con los cuales contamos. Si bien es cierto que el contexto social, familiar, emocional y ambiental son el conjunto del hábitat en el cual nos desenvolvemos, la responsabilidad ante nuestros propios actos y consecuencias guiará de una mejor forma a las actitudes resolución de conflictos que se tienen, hasta con nuestra propia mente. Alex Delarge, es uno de los personajes más cautivadores de la historia del cine, puesto que es el claro ejemplo del libertinaje sin un propósito en sí de cambio. Esto no quiere decir que no se pueda llegar a un cambio. La humanidad tiende a no tomar responsabilidad de las consecuencias y eso genera un cuadro de estrés al cual no se quiere o pretende someter para evitar la depredación. Sin embargo, la capacidad de conciencia nos permite tener una mayor responsabilidad sobre los efectos de las acciones comunes del diario vivir. La complejidad de experiencias a lo largo de la vida, pondrán en el reto constante de saber si hemos ocupado las tres regiones cerebrales de forma efectiva para la resolución de conflictos.

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