Concierto de Juguete rabioso por 30 años de “Caras modernas”
El año de 1992 significó para el rock mexicano una etapa productiva, recordando los lanzamientos debuts de grupos como Café Tacuba, homónimo, Santa Sabina, homónimo, la Lupita ¨Pa´ servir a ud.”, la Cuca “La invasión de los blátidos”, Sergio Arau, “Sergio Arau y la venganza de Moctezuma” y el Juguete Rabioso, entre otros más. Para los integrantes de esta última banda, su primera producción discográfica “Caras modernas”, representó el éxito en la escena del rock nacional, al presentar un toque irreverente y contestatario en sus letras.
Para este 2022, los integrantes del Juguete Rabioso, Federico Bonasso, vocales, Santiago Behm, bajo y, Coco Ruíz de Velasco, batería, decidieron festejar los 30 años de su disco debut “Caras modernas”, ofreciendo un concierto gratuito en el Centro Cultural España el 10 de diciembre del año en curso. Para la celebración fueron acompañados por los guitarristas Miguelón Shine (Los Daniels) y Raúl Crespín, así como el tecladista Paco Vanegas
Para dar inicio al concierto, la banda proyectó un video donde desfilaron imágenes de la banda a fines de las décadas de los ochenta y principios de los noventa, y videos de fans comentando que representaba para ellos el disco “Caras modernas”.
Después de ese viaje en el tiempo, Bonasso con el puño en alto, y los demás miembros de la banda, irrumpieron en el escenario con “Caras modernas”, logrando de inmediato que los asistentes respondieran cantando al unísono. Seguirían con “Ya no quiero” e “Individualidad”, donde el vocalista ya se había despojado de su gabardina, para mostrar su playera donde podíamos leer Fede 10, lo cual significaba que estábamos ante un volante, que estaba coordinando el ataque -concierto- del grupo. Así mismo, en ese momento dirigió las primeras palabras a los fans, al mencionar que eran increíbles, al salvar la rabia durante estos años, y en un ritual de autosacrificio, les entregó los corazones de los integrantes de la banda en sus manos.
Prosiguieron el concierto con “Nunca”, para después retroceder a la época de la preparatoria y dar paso a “Le revienta el cuerpo”. El momento de recordar al recién fallecido cineasta y productor argentino Jorge Denti se dio con “Levantaré”. Al terminar con ese pequeño homenaje, continuarían con “Para mí”. Posteriormente Federico Bonasso detuvo la catarsis, para recordar a su ex compañero fallecido un año atrás, el guitarrista fundador Fernando Urdapilleta, y dedicarle “La memoria en donde ardía”. Otro momento emotivo llegó con “Canción de ciudad”, que interpretó su compositor Santiago Behm, en compañía del cuarto miembro del juguete, el tecladista Jaime Lichi, -quien grabó ese instrumento en “Caras Modernas”-. Por supuesto, el respetable una vez más se unió en una sola voz. El grupo retomó el frenesí en sus manos e interpretó “Tu amor mata”, para finalizar con “Mercenario”, donde el vocalista seguía corriendo por el escenario, como en los viejos tiempos, haciendo explotar el recinto.
En ese momento los fans pedían más, y los rabiosos regresaron con canciones de su segunda producción discográfica “Alma total” (1995). Las rolas fueron “Ella es una chica”, “Dile no a la represión” y “No dejes que mi rabia muera”, que de la misma manera fueron coreadas por los fans. La banda no podía irse sin agradecer el apoyo de los asistentes de esa noche, que según manifestó Bonasso, son a todo dar, y a los cuales les quieren desde el centro del corazón. Definitivamente con este concierto el Juguete Rabioso demostró que regresó con más experiencia, acumulada con los proyectos solistas de cada una de sus integrantes, la intensidad juvenil que no han perdido en el escenario, y una rabia que prometen seguirá esparciéndose por mucho más tiempo. Ya son eternos.