En la UNAM sí hay individualismo pero también colectividad
En la UNAM sí hay individualismo…
Es verdad que en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se instaló desde la década de los ochenta un modelo de competitividad académica a través de pagos por estímulos, y que hoy ha definido el rostro de la planta académica de la institución, con un perfil más individualista. El propio José Sarukhán cuenta en sus memorias que cuando era Rector de la Universidad, estaba preocupado por la fuga de cerebros a finales de los ochenta, desatada por la falta de buenos salarios para los académicos, mismos que se habían empezado a pulverizar desde inicios de la década por el dichoso tope salarial, impuesto por el régimen priista, con el arribo de los nuevos tecnócratas neoliberales en 1982, pues su objetivo era detener la inflación pasando la factura a los trabajadores y no a los empresarios.
Sarukhán Kermez narra en sus memorias que se entrevistó con el Presidente Salinas de Gortari y varios altos funcionarios para pedir un aumento al presupuesto que ayudara al salario de los universitarios, la respuesta del gobierno fue “Señor Rector, lo entendemos y estamos de acuerdo con sus argumentos, pero una elevación de los sueldos en la UNAM significaría extenderlos a todo el sistema universitario público y no hay recursos para ello.” Lo de fondo no era un asunto económico, sino ideológico, ya que el verdadero objetivo era deshacer el tejido social que se había construido durante la década de los setenta, con el surgimiento del sindicalismo universitario independiente que había logrado cimbrar al régimen político.
Los sindicatos ya no los podían desaparecer, pero había que derrotarlos en la lucha política, convertirlos en organizaciones gremialistas, es decir, que dejaran de luchar por una transformación de proyecto nacional a cambio de pelear únicamente por sus intereses gremiales, de intereses particulares; para que el modelo neoliberal recién impuesto lograra avanzar era necesario derrotarlos ideológicamente. Y digo que el tema económico era secundario porque finalmente se inyectó dinero a todas las universidades del país para fortalecer el salario a través de programas de estímulos, de competitividad académica, dicho de otra manera, el incremento al salario ya no depende entonces de la unidad de las organizaciones sindicales, sino de la labor individual de los académicos. En ese sentido, el Presidente Andrés Manuel López Obrado tiene razón al señalar que la UNAM se volvió individualista; sin embargo, decirlo desde la tribuna presidencial en vísperas de la definición del presupuesto a la mayor casa educativa del país, me parece un despropósito.
Pero también colectividad…
Que el Presidente mencione esa característica individualista, sin decir que la UNAM es mucho más que eso y que incluso, es al mismo tiempo una herida abierta al modelo neoliberal, disculpen, pero nos hace pensar que intenta legitimar un posible recorte al presupuesto, lo que sinceramente sería un craso error de su parte. Yo he defendido en distintas ocasiones -no siempre- a su gobierno, pero en este tema del presupuesto a educación, no hay duda: hay que defender su incremento.
La Universidad Nacional es una herida abierta al modelo neoliberal porque desde los años ochenta la han intentado privatizar, primero en 1986 y luego en 1999 cuando se incrementaron las cuotas de inscripción. En ambos momentos los estudiantes no lo permitieron gracias a sus movilizaciones y huelgas (su colectividad). El argumento de los neoliberales para privatizar todas las instituciones públicas es que eso mejoraría su calidad de servicio. Así fue como vendieron -mejor dicho, regalaron- Teléfonos de México a Carlos Slim. En el caso de la UNAM, se ha defendido pública y gratuita, sin perder su calidad educativa. Es por lo tanto, un ejemplo nacional a contracorriente de la hegemonía neoliberal.
Esa colectividad que ha definido a los estudiantes universitarios no es por generación espontanea, se ha preservado a través de las aulas gracias a sus profesores, quienes en su mayoría politizan y generan conciencia en sus estudiantes. A pesar de la dinámica laboral de los docentes, que ya mencioné. Luego entonces, no matizar el valor ideológico de la institución tiene un tufo de coyuntura política.
Los que pedimos un incremento al presupuesto, defendemos un proyecto educativo (de una universidad pública, laica, gratuita, de masas, y de calidad), no a una élite. Es un error creer que recorte es sinónimo de reforma. Reducir su presupuesto no saneará sus finanzas; sólo la asfixiará. Eso no exime que se exija transparencia en el manejo financiero, pero eso es otro momento político, que como bien dijo el Presidente, nos toca a los universitarios reclamar. Mezclar los dos momentos del incremento a su presupuesto con la exigencia de transparencia, es apostar solo por la crisis interna de la institución, sin pretender mejorarla.
Nunca debemos olvidar que los dos intentos de privatización de la UNAM (1986 y 1999), sucedieron inmediatamente después de un recorte a su presupuesto, pues sostener una institución tan grande con una matrícula de más de 350 mil alumnos, requiere de enormes recursos económicos, luego entonces, combatir al neoliberalismo significa defender el incremento de presupuesto a la UNAM. La crisis sanitaria nos enseñó que la formación de profesionales y el descubrimiento científico, son la clave para resolver de raíz, los graves problemas que el actual modelo económico ha provocado en la naturaleza.
JESUS DAVID MANCILLA SANCHEZ
en el contexto, noto acotado al Presidente,por los organismos internacionales y el empresariado, no puede soltar las amarras a los topes salariales y /o presupuestales en el caso de la UNAM, Tambien permea mucho fanatismo en los antiobradoristas, tanto como con los AMLOvers, yo tendria cuidado con el PRIAN, Saludos Consejero Octavio
Raul T
El presidente no define los topes salariales de la universidad. No tiene esa facultad, la autonomia universitaria se lo impide.
El posible "incremento" que no aumenta el presupuesto de la UNAM
[…] educación, y a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en cambio lo que predomina el debate público es si la Universidad es neoliberal o no, mientras que el Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Hacienda, propuso un aumento de […]
Raul T
Los sueldos no son determinados desde la presidencia. La inequidad en los salarios de la unam es total responsabilidad y deciscion de los que administran la unam. ¿ Por que no mencionas cuanto gana Sarukhan? El mismo Sarukhan lleva decadas como academico influyente, ¿ que ha conseguido para promover la equidad academica dentro de la unam?
Raul T
Los sueldos no son determinados desde la presidencia. La inequidad en los salarios de la unam es total responsabilidad y deciscion de los que administran la unam. ¿ Por que no mencionas cuanto gana Sarukhan? El mismo Sarukhan lleva decadas como academico influyente, ¿ que ha conseguido para promover la equidad academica dentro de la unam? ¿ Por que hay que defender el incremento de presupuesto?. Yo creo que primero hay que defender la honestidad y la buena administracion de los presupuestos. En la unam se desperdicia mucho dinero alimentando a la clase academica y sus excesos.