Lo bueno, lo malo y lo feo de 2020

Lo malo

Tras el brote de una neumonía atípica en China en noviembre de 2019, en marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud declara que el mundo se encuentra ante la amenaza de una pandemia provocada por un nuevo Coronavirus, SARS-COV-2. En abril, ante el riesgo de expansión del contagio, en México se estableció la Jornada Nacional de Sana Distancia y nos metimos en cuarentena desde entonces y por tres meses con semáforo rojo en la Ciudad de México y en algunos otros estados de la república. Hoy… a nada de que termine el año, nos volvemos a confinar para evitar, sobre todo, la saturación de hospitales y, por supuesto, el contagio. 

Lo feo

En México, lo feo sin duda ha sido la rancia oposición y la comentocracia a la que no le ha importado la grave situación de la pandemia y se ha dedicado a difundir Fake News. Por ejemplo, al anunciar en sus redes sociales sobre la primera muerte de un paciente de Covid-19, noticia que después fue desmentida por los propios familiares del supuesto difunto, el empresario José Kuri. Asimismo, las constantes críticas, la mayoría de las veces infundadas y falseando datos, a la estrategia federal para contener la pandemia.

La crítica siempre es útil y necesaria, el problema es que las críticas de la oposición y de la comentocracia obvian la evidencia de que en México, el alto número de defunciones tiene relación directa con el hecho de que las personas que han muerto padecían, en buen número, otras enfermedades que afectaron su sistema inmunológico. Asimismo, olvidan la realidad histórica de que en los últimos 30 años se desmanteló el sistema público de salud y tenemos por lo menos que reconocer que a pesar de ello, el gobierno de la 4T ha hecho malabares para evitar la saturación de los hospitales públicos y así poder dar atención a quienes enferman de Covid-19. 

Por supuesto que no debemos olvidar a las más de 110 mil personas que han fallecido, a sus familias y amistades que aún hoy les lloran y que posiblemente ni un último adiós pudieron darles dadas las circunstancias. Sumado a ello, al término de este 2020, la Ciudad de México regresa al semáforo rojo y al cierre de establecimientos no esenciales debido al aumento de contagios y a la posible saturación hospitalaria, de seguir este nivel de contagio. Cerramos el año con la recomendación de no hacer fiestas, ni reuniones por celebraciones navideñas y de fin de año.

Lo bueno

En lo personal, este tiempo de encierro fue un período de mucha creatividad y, contrario a lo que se pudiera suponer, conocí a muchas personas muy interesantes a través de las redes sociales como Twitter y YouTube y eso fue muy bueno porque uno de mis propósitos de 2020 era conocer gente nueva, hacer cosas que nunca había hecho (inicié asistiendo a un partido de fútbol y viajando a Juxtlahuaca, Oaxaca, por primera vez) y aceptar todas las invitaciones que me hicieran para asistir a reuniones sociales. 

Aproveché este tiempo para escribir y publicar, inicié mi programa en línea “Charlas de Café” y de ahí me invitaron a participar en Los Desconsiderados y ocasionalmente en el canal de El Mariachi Ninja en YouTube. Conocí personas increíbles gracias a las redes sociales: Óscar de Pablo, Christian, Bianca, Arturo (Mariachi Ninja), Manuel, Alessandro, Germán, Rafael, Raúl, Pamela, Leopoldo y Octavio. 

Después de muchos años volví a tocar el piano (muy mal, pero estoy entusiasmada con eso), tuve oportunidad de cursar un taller de Lengua de Señas Mexicana con Seña y Verbo, hacía años que quería aprender, y como me empezó a interesar mucho la cultura coreana empecé en Duolingo a intentar aprender coreano y bueno he aprendido algunas palabras y hasta frases y a comprender un poco la estructura sintáctica de esta lengua. Ha sido un año de pérdidas, sin duda, lo más importante ha sido mantener la paz emocional, la cordura dentro de este encierro y, sobre todo, la salud.

Y… lo mejor (La vacuna)

Está llegando la primera tanda de vacunas Pfizer contra el SARS-COV-2 y ya hay un plan implementado para iniciar la vacunación en primera instancia al personal de salud y a las personas que por su actividad están en la primera línea de acción contra el Covid-19. Las personas mayores también serán de las primeras en recibir la vacuna y así hasta llegar a la población de menor rango de edad. Este es sólo un primer paso y da mucho gusto saber que ya hay vacunas aprobadas y que con su nivel de efectividad se podrá por lo menos mitigar el contagio y por tanto el número de fallecimientos.

A pesar de la coyuntura y de lo difícil de la situación, nuestro país no obtuvo ningún tipo de deuda para enfrentar la situación por la pandemia. Las clases se dieron en línea en todos los niveles y a pesar de las dificultades, ahí la llevamos, avanzando y esperando salir lo mejor librados. A pesar de los embates de la oposición y los opinólogos, cuyo comportamiento ha sido más bien mezquino por decir lo menos, parece que el actual gobierno y el presidente AMLO está saliendo avante, ya lo veremos en 2021 y las elecciones que se avecinan. El tiempo lo dirá.