“Epidemia larga”, el video de López-Gatell que destrozó otra noticia falsa
“Epidemia larga” se llamó este video, dijo Hugo López-Gatell con suma tranquilidad. Apenas habían terminado de proyectar una recopilación con distintos momentos de conferencias vespertinas pasadas. En cada fragmento Gatell repetía, con más vehemencia unas que otras veces: “preparémonos para una epidemia larga”. La sorna con que arrojó a la cadena nacional esas palabras, “Epidemia larga”, nunca la conoceremos, porque el doctor hace un uso magistral de un rostro de jugador de póker. Aunque todos percibimos su ironía.
El 25 de junio termina la pandemia…
“Epidemia larga”, el video que pasará a la historia como una de las más contundentes respuestas mediáticas nunca debió ser realizado. Pero se convirtió en obligatorio debido a los títulos en distintas notas de diarios nacionales y locales de todo el país. La noticia era muy efectista: “Hugo López-Gatell dijo que la pandemia terminaría el 25 de junio”. En varios informativos aclararon después, en la parte interior de la nota, que la fecha correspondía al final de la primera fase de la epidemia, siempre y cuando, se pudiera mitigar su expansión.
Los titulares de esas notas tenían una intención simple: retratar a Hugo López-Gatell como un embustero, o en el mejor de los casos, ineficaz. Por eso, la respuesta en video es aplastante. No tuvo la necesidad de desmentir a nadie con palabras acordes a la situación, como lo ha hecho en diversas ocasiones; no necesitó explicaciones científicas para avalar sus dichos; no recurrió a medios externos para esclarecer información posiblemente confusa. Solo insinuó, con su breve video, la mala memoria de los periodistas, la falta de entendimiento de sus editores, o la estupidez de facto de quienes hayan escrito sobre el tema.
A estas alturas de nuestra historia pandémica, estamos convencidos que Hugo López-Gatell se solaza de la pobreza intelectual de los adversarios mediáticos del grupo de epidemiólogos. Pero lo hace con amabilidad, sin displicencias, mientras cada uno de los detractores se arroja, fetal, al suelo, en medio de un llanto humillante:
“¿Se espera una epidemia corta, o una epidemia larga?”, preguntó a los reporteros de la conferencia vespertina. “Largaaa”, respondieron. “Larga, se dice aquí al unísono”, agregó Gatell, preparando el remate. ¿Quién piensa aquí, que será una epidemia larga?”, preguntó de forma distinta, y todos los reporteros y las reporteras levantaron la mano. “Y usted, en su casa, también lo está considerando”. Así recalcó una idea repetida decenas de veces por él, y millones de veces por la ciudadanía. Hubiera sido menos humillante, para algunos editores de diarios nacionales, haber recibido un bofetón en público.
Los medios y su tradición embustera
No sólo ridiculizó a varios medios, sino presentó, a cada uno de quienes escribieron acerca del tema, como un grupillo de farsantes. Desde la mañana del 25 de junio los comentarios en las redes intentaron cebarse con la figura del Subsecretario de Salud, pero otros sucesos más relevantes, como el futbol europeo, apagaron los hashtags contra Gatell. El video “Epidemia larga” será una respuesta dolorosa en el ego inflado de algunos comentaristas.
Por supuesto, el diario Reforma, a través de la pluma de una tal Natalia Vitela, hizo pública la nota. En apenas 100 palabras, la reportera explicó la supuesta falla en los “pronósticos” de Hugo López-Gatell. Asimismo, mencionó que se trataba de “la primera fase”, pero omitió, como es tradición editorial en el Reforma, colocar esta relevante información en su encabezado.
“No pensamos que haya mala voluntad. Hay varios elementos para no entender a cabalidad un mensaje”, dijo López-Gatell sobre esto. Pero sí la hay. Y no sólo eso. Hay una necesidad miserable de muerte, dolor y sufrimiento de mexicanos, por parte de quienes a diario se lanzan contra los números de la epidemia. Ese es el tema, porque ni Natalia Vitela, ni la gente del Reforma, ni de El heraldo de México, ni Radio Fórmula, Infobae, u otros medios, son imbéciles. Por el contrario. Son bastante listillos para hacer negocios con información falsa.
El falso análisis fue propagado por distintos medios, periodistas, políticos y uno que otro vago, como el tal Vampipe. Así, Felipe Calderón, Guadalupe Acosta Naranjo, Pedro Ferriz, Javier Risco, Denise Maerker, entre muchos otros, arrojaron sendos mensajes sobre el fin de la pandemia y La supuesta mentira dicha por Hugo López-Gatell. Y los bots hicieron, a su vez, su respectivo trabajo para replicarlo cientos de miles de veces.
Ya no podemos decir que los medios se están jugando el prestigio, porque ése ya fue rematado meses antes, y aún no sabemos quiénes están detrás de la propagación de noticias falas, aunque tenemos algunas ideas. Los recursos inyectados a medios de comunicación contrarios a Andrés Manuel López Obrador han conseguido sembrar dudas en la apreciación de la pandemia. Su trabajo ha sido exitoso, sin duda, pero su alcance todavía es menor. Mucho se ha gastado para comprar plumas, comunicadores y bots, y normalmente, al final, son ridiculizados a través de elementos bastante simples, como es, por ejemplo, un video llamado “La epidemia larga”.
Las causas de la pandemia larga
“Tenemos esta epidemia larga porque es la consecuencia benéfica de haber reducido la cantidad de contagios diarios”, dijo el mismo 25 de junio Hugo López-Gatell. Con frases similares, ha repetido decenas de ocasiones, en distintos escenarios, la misma idea. “En vez de tener una curva epidémica muy grande, que quiere decir, muchos casos en muchos días, tenemos menos casos a lo largo de mucho más tiempo”.
¿En verdad, gente del diario Reforma, es un concepto tan difícil de entender? Algunos periodistas deberían regresar a la universidad. No para estudiar periodismo, sino ética. Con lo ganado por publicar noticias falsas, deben tener para pagar una buena escuela durante varios años. Si no lo tienen y aún así reparten fake news, es comprensible que no entiendan la frase “epidemia larga”.
Lupita Padilla
López Gatell ha emergido de lo ordinario. Se actualiza diariamente. Profesional y elegante en sus palabras y modales. Domina la materia. Entonces no nos admira que la oposición intente distorsionar su mensaje.
Ma. Dolores
No deja de sorprender la generosidad al compartir el conocimiento,sino su objetividad al responder las " preguntas de los comunicadores(as)"