El primer año de gobierno de AMLO
@miguelmg28
El balance objetivo y no ideológico
Este primer año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha estado cargado de mucha actividad. Los balances de su gobierno pueden tener una buena carga ideológica, sin embargo, ante los hechos la ideología no tiene lugar. El gobierno de la cuarta transformación ha aplicado una buena cantidad de programas sociales para aquellos sectores de la población que no se beneficiaron de las políticas neoliberales de los gobiernos pasados. Buena parte de los intelectuales que gozan de espacios televisivos para descargar sus críticas hacia lo que consideran negativo del gobierno, olvidan que los sectores de la población no comen ideología, por lo cual la crítica hacia los programas sociales tachándolos de “asistencialistas”, en realidad están fuera de lugar dado que es muy cómodo señalar un programa social cuando se tiene el estómago lleno, se toma cafés caros y se estudia en universidades del extranjero.
Programas de desarrollo social
Programas como Bienestar para las Personas Mayores, Jóvenes Construyendo Futuro, Becas para el Bienestar Benito Juarez, así como las Universidades para el Bienestar que han abierto sus espacios en toda la República, son muestras de que a este gobierno le preocupa direccionar los recursos públicos hacia los sectores más vulnerables de la sociedad mexicana. Sin duda, estos programas con los fallos administrativos y estructurales que obviamente tendrían, dado su implementación primeriza, son la apuesta de este gobierno para diferenciarse de los anteriores. Nuevamente podrán hacerse las críticas pertinentes, pero en tan sólo un año de gobierno el presidente López Obrador ha dejado en claro cuál es su prioridad en materia de política social: primero los pobres.
El lastre y descomposición del país no se corrige en un año de buen gobierno
Es evidente que el pueblo mexicano tiene las ganas de que este país cambie, sin embargo, esas ganas no deben perder de vista que México permaneció inundado durante más de 30 años en políticas neoliberales, por lo cual a penas es el comienzo para dar paso a un gobierno “antineoliberal” o “posneoliberal”. Desde distintas posiciones ideológicas se le ha reclamado al presidente por anunciar el “fin del neoliberalismo”, ya que, según aseguran, este gobierno es más de lo mismo. Lo que no entienden ambos extremismos ideológicos es que se debe pensar el neoliberalismo no únicamente como políticas económicas, sino como una ideología que durante más de 30 años se consolidó en cada uno de los mexicanos. Apelando a un individualismo extremo, no causa sorpresa que se tache de “asistencialismo” todo aquello que no sea para beneficio propio. Lo que el presidente López Obrador está haciendo es una deconstrucción ideológica y económica de las políticas neoliberales, por lo cual en este momento a penas encamina al país hacia una transformación.
Revirar el neoliberalismo es un proceso que requiere más que un año
Hasta cierto punto es entendible que estos sectores extremistas aún estén casados con la revolución como una vía para tirar un sistema y construir uno nuevo, sin embargo, las condiciones políticas y económicas actuales no son favorables para declarar una “cuarta revolución”. En este sentido, el presidente López Obrador hizo bien en declarar una cuarta transformación en tanto que se está construyendo un panorama que dé paso a gobiernos de corte no-neoliberal. Esta tarea no es nada sencilla, pero para los críticos de la cuarta transformación pareciera ser un asunto tan sencillo como declararle una guerra a Estados Unidos, anunciar un carácter no extractivista, correr a los empresarios del país e instalar sistemas comunales por toda la ciudad.
A un año de gobierno, AMLO cuenta con alta aprobación popular
Está claro que la mayoría de la sociedad mexicana desea un cambio para el país. Las encuestas con las que cierra Andrés Manuel López Obrador en este primer año de gobierno, demuestran que tiene el respaldo del pueblo mexicano incluso con las difíciles decisiones que ha tenido que tomar dadas las condiciones actuales del país. Da la impresión de parecer una tarea sencilla cambiar las lógicas neoliberales, sin embargo, lo cierto es que a penas es el comienzo de lo que podría ser un verdadero cambio para este país. Entender la cuarta transformación como una utopía es la tarea de los ciudadanos que desean alcanzarla caminando día a día.
Las críticas son bienvenidas, así como los señalamientos que se le hacen a este gobierno. El presidente, incluso, ha fomentado estas críticas y señalamientos dada su exposición diaria en las mañaneras. El asunto es que las críticas provenientes de los opositores, se encuentran centradas en las limitaciones de este gobierno, es decir, que incluso cuando se beneficie el 90% de este país, siempre existirá un 10% que tenga algo que reclamar. El lema es “primero los pobres”, así que quizá sea buen momento de re-pensar qué quiere decir esto.
