La crueldad contra Daniela tiene como antecedente su presencia en todas las manifestaciones populares del pueblo chileno.

El asesinato de “La mimo”, se dirigió para matar el poder que representa la subjetividad de la expresión artística y cultural, esa que te convoca a luchar con alegría y felicidad por la liberación humana. Daniela representa un símbolo de lucha anticorrosivo contra la opresión. La educación, cultura y expresión artística. Armas letales capaces de derribar cualquier gobierno tirano.

Algo parecido sucedió con el asesinato de Víctor Jara, quien fue secuestrado en un estadio de fútbol, improvisado como campo de concentración, torturado y asesinado con mucha saña, con el objetivo de exterminar el enorme peso simbólico que representaba en ese momento su música.

Por eso mataron a “La mimo” los carabineros de Chile, porque se gestaba un símbolo de la lucha popular que amenazaba el símbolo de la muerte y opresión en el corazón del neoliberalismo. Por eso te mataron Daniela, porque representas la alegría en las luchas, la sencillez y el amor, eres el sinsentido inexplicable, esa fuerza invisible que invoca a poner el pecho frente a las balas por una causa superior.

Quebraron los huesos de tu cuerpo pero no podrán hacerlo con tu espíritu, ese que nos mueve hacia adelante, el que nos convoca a no rendirnos, a soñar y a buscar la felicidad. Estoy seguro que tus últimas lagrimas fueron para pedirnos que nos nos rindiéramos, que continuáramos y sigamos adelante.

Te mando un abrazo Daniela, donde quiera que te encuentres.