La subversión se presentó en Radio UNAM
El pasado viernes 31 de mayo del presente año, la sala Julián Carrillo de Radio UNAM, como parte de su festival Intersecciones, de conciertos radiofónicos en vivo, abrió sus puertas a Federico Bonasso (Buenos Aires, 1967), ex líder del grupo de rock noventero Juguete Rabioso, quien presentó su show Las tristes rolas de la Subversión, trasmitido por el 96.1 de FM. Para ello, se hizo acompañar de su banda La subversión, integrada por músicos de reconocida trayectoria y calidad como los guitarristas Raúl Crespín y Miguelón, el bajista Ariel Cavalieri (Bersalieri), el baterista Luis Huerta (Julio Revueltas y Lila Downs) y la cantante/corista Nay Stanfield (Dauma, Betsy Pecanins y Guillermo Briseño).
Y como lo había vaticinado el cantante, literato, compositor y percusionista argentino/mexicano, el concierto que ofrecería esa noche fue una celebración a lo íntimo, de rescate de las canciones más profundas y cercanas al corazón, al amor y el exilio, dejando de lado las canciones más festivas y aguerridas de su periodo con el Juguete Rabioso como “Mercenario”, “Tu amor mata”, “Dile no a la represión” y “Sangre maldita”, entre otras más. Pero habrá que decirlo, a pesar de haber sido una velada íntima, llena de recuerdos y nostalgia, el show destiló virtuosismo, entrega, amistad y gran energía, ésta última, sello personal de Bonasso en cada presentación.
El auto-nombrado “hijo del exilio”, cumplió su promesa de trasladarnos esa noche en una máquina del tiempo al pasado, pero también al futuro. Para lo primero, el set list se conformó de canciones de los dos discos de su ex banda Juguete Rabioso. De su grabación debut “Caras modernas” (1992), sustrajo Levantaré, con la que abrió el concierto y, La Memoria donde ardía, con la que cerró su show. Para esta última, fue acompañado en el escenario por todos los músicos invitados, y por supuesto, de Francisco de Quevedo y, un fragmento de su soneto “Amor constante más allá de la muerte”. De su segunda grabación “Alma total” (1995), escuchamos Todo es deseo, con su letra triste, pero excelsa guitarra, Sombra y luz, donde fue acompañado por Pablo Ahmad y su bandoneón, El brillo, interpretada por Carina Ricco y, Ecos del alma, con la cual llamaría a escena a Santiago Behm ,bajo, y Coco Ruiz, batería, integrantes del Juguete Rabioso, así como al maestro Mario Santos, en el teclado, quien esa noche hizo realidad el sueño de la banda noventera de tocar con ellos.
Con respecto al futuro, estuvo presente con el primer disco solista de Bonasso “La subversión” (2017), trabajo que se conformó a partir de once disco personales e íntimos del músico, que eran obsequiados en los conciertos de Juguete Rabioso en la década de los noventa. Las canciones de esta producción fueron Canales; Todo se va, considerada por Bonasso como el corazón del show, y entendido perfectamente por Alejandro Marcovich (ex Insólitas Imágenes de Aurora), quien ejecutó con virtuosismo y sentimiento el solo de guitarra –posiblemente el momento más emotivo del concierto-. Completarían el set list Lluvia, con Santiago Behm, ex bajista del Juguete en la voz, y, Misisipi, interpretada por los hijos y sobrinos de Bonasso, en recuerdo de Enrique Sapag, asesinado por la dictadura argentina.
Habrá que mencionar que Federico Bonasso esa noche no quiso dejar pasar la oportunidad de reconocer la valía de su hermana Flavia Bonasso como artista, quien durante el concierto, fue narrando las canciones con sus trazos y pinceles. De la misma forma, hubo un gran reconocimiento a la sensibilidad como compositor de Santiago Behm, al interpretarle su canción Historias, contenida en el primer disco solista de Behm “Lugares. Imposible” (2003). Para aderezarla, René Torres (Maxia) les acompañó con el violín.
Sin duda, esa noche Bonasso estuvo cobijado por el cariño y aprecio de familiares, músicos invitados, amigos y fans, que agradecimos su presentación en la sala Julián Carrillo, sin importarnos que haya manifestado que ha retomado su carrera solista a una edad madura, que pareciera una locura, pero de la cual, todos esa noche, estuvimos complacidos y participando de ella. Y para hacerlo más demencial, está el proyecto de lanzar la grabación del concierto de esa noche. Lo cual por supuesto, esperaremos con ansia rabiosa.
