Gato con Lentes

Superhéroes: la mitología del siglo XXI

Andrea Nieto Dávila


29 abril, 2019 @ 10:38 am

Superhéroes: la mitología del siglo XXI

Un hecho es la verdad de todos,

la fantasía es la verdad de nadie,

pero entre estos dos está el mito,

que es la verdad de algunos.

-Devdutt Pattanaik

 

La palabra mito no es sinónimo de mentira. Los mitos son guías morales que cada cultura tiene para explicar, orientar, enseñar y aprender esas reglas que no se dicen pero se siguen. Para que éstos sigan vivos, deben mantenerse en constante cambio o están condenados a morir. La biblia es uno de los ejemplos más claros. Hoy el libro es atacado despiadadamente porque a la luz de la ciencia y la razón actual, es complicado sustentar que una serpiente hable y que vinimos de Adán y Eva. No es la obligación de la biblia defenderse, ni de su interés, más bien el error de quienes la defienden es no asumir el mito como una metáfora cultural escrita hace siglos que pierde su valor al tomarse como un hecho “objetivo”, con principios actuales. Si es grave declarar un mito como mentira, es aún peor declararlos como verdad.

Después de la Ilustración, la humanidad comenzó a cuestionar todo y a “desmitificarse”, especialmente en Europa. No hay nada de malo en eso, el problema es que la palabra se desprestigió hasta ser sinónimo de mentira y no quedaron claros cuáles fueron los nuevos mitos, aquellos sobrevivientes que se asentaron discretamente en las artes. Los mitos son indispensables y están presentes todavía, cada vez más complejos respondiendo a la complejidad e interconectividad de nuestra sociedad. Hay académicos célebres como Enrique Dussel que sostienen a la modernidad como uno de los mitos actuales; otros hablan del machismo o incluso del capitalismo. Son temas muy interesantes, y aunque sería fascinante profundizar más en ellos, hablaremos de la teoría que apoya el mitólogo Joseph Campbell: las películas como mitología actual.

El cine es una de las ramas del arte que dio la bienvenida a la mitología sin darse cuenta. George Lucas, autor de Star Wars declaró repetidamente la influencia que tuvo Joseph Campbell en la saga de sus películas[1]. Otros que entendieron la importancia de la mitología en el cine fueron las hermanas Wachowski, escritoras de Matrix, Christopher Vogler en El Rey León, Aladín y La Bella y la Bestia e incluso Stanley Kubrik en 2001: Odisea en el espacio[2]. El impacto que tienen las películas refleja la cultura en la que están, sus principios, sus valores. No es casualidad que las películas indias no sean un éxito en México, o que el cine de Suecia no sea del interés de un niño en Australia. En cambio, Estados Unidos en su camino de devorar al mundo con la globalización, extiende sus brazos con miras a asentar no sólo un mercado de consumo homogéneo, sino también un monopolio en ideología que todo el mundo pueda comprender. La muestra en carne viva es Hollywood y sus éxitos mundiales.

Hablemos de súper héroes. Es fascinante ver noticias que digan Niño de EU se niega a pelear porque “eso no lo haría un Jedi”. Eso sólo quiere decir una cosa: George Lucas triunfó, cruzó la barrera del cuento y se convirtió en un mito que influye en el comportamiento y los valores de una población mediante un lenguaje metafórico. Las películas basadas en cómics también nos están metiendo a todos en los universos — que ahora podemos llamar con atrevimiento— míticos y lo más interesante es que el discurso no va en un solo sentido.

El mundo está cambiando, estamos en la cuarta ola de feminismo de la historia. El mito del machismo se está transformando y deconstruyendo frente a nuestros ojos y quien haya puesto atención a las películas de los últimos años puede ver que las heroínas como Elastigirl de los Increíbles, Viuda Negra, Wonder Woman, Gomora, Harley Quinn, Capitana Marvel por mencionar algunas, comienzan a aparecer en las películas con papeles más allá de amantes o de platillos visuales por sus trajes ajustados. Los roles de estas mujeres son aún pocos, pero cada vez son más. Abundan las escenas y películas enteras con protagonismo de mujeres e incluso se puede apreciar que hay un significante incremento en el equilibro de actividades como conducir, cocinar, luchar, liderar, sacrificarse, llorar o rescatar.

Claramente aún hay mucho trabajo que hacer, y no existe un balance todavía, pero si se aprovecha esta herramienta tan poderosa que revienta taquillas y se mete en el inconsciente de una parte de la población tan grande, probablemente vamos por el camino correcto. Para evitar cualquier spoiler, las y los invitamos a ver la película de Avengers: Endgame y que nos cuenten si notan esos giros, pequeños pero sólidos, que comienza a dar el cine de superhéroes, que es potencialmente el recurso más poderoso de mitos en la actualidad.

avengers endgame mito cine
Imagen: Internet            www.revistaconsideraciones.com

[1] https://mitoypsique.wordpress.com/2016/01/09/348/

[2] https://en.wikipedia.org/wiki/The_Hero_with_a_Thousand_Faces#In_film

Andrea Nieto Dávila

Tesista de la Facultad de Arquitectura. Editora de la sección de feminismo porque en secreto no quiere que acabe el mundo.