Alteridad

El feminismo pose del macho de clóset


24 febrero, 2019 @ 6:15 pm

El feminismo pose del macho de clóset

@MonsalvoMarlene

Es 2019 y está en boga hacer las cosas “bien”. Si no eres ambientalista, animalista, a favor de los derechos LGBT-XYZ, defensor de los niños, de los migrantes, etcétera, simplemente no entras  en el arquetipo de ese sujeto postmoderno y ultracivilizado que dices ser. Entonces, dentro de este discurso inclusivo donde, según, te importan los derechos de todos los seres vivos, pues te topas con que las mujeres también entran dentro de esta categoría (¡ouch!).

Así es. Ahora, la revolución se tiñe de verde y está llena de mujeres abortistas que se dejan crecer los pelos en lugares insospechados y no tienen miedo de decir lo que piensan. Obvio tú, como hombre culto y de buen criterio, no sólo respaldas esta lucha, sino que te asumes como feminista. No me mal entiendan, estimades lectores, a toda mujer feminista le encanta saber que en su círculo hay hombres que verdaderamente respaldan la lucha feminista pero, ¿qué tan legítimo es esto?

Me comentaba alguna vez un colega sobre el tema: “Bueno, creo que dentro de lo que cabe, es un avance el hecho de que aunque sea por mera pose, exista esta semiconcientización, ¿no crees?” Por supuesto mi respuesta no fue otra que un rotundo ¡No! En principio, podríamos pensar que incluso cuando el mercado se haya apropiado de la palabra feminismo –y que nuestro amigo más “chairo” (sí, ese que ama a Trotsky y usa una playera de Manu Chao)se lea el Segundo Sexo– significa que lo público impactó a lo privado como normalmente lo hace. Pero not quite.

Para desgracia de todes, las malas prácticas que definen la cultura occidental –cultura de la violación, racismo, clasismo, etcétera–, a través de  instrumentos de manipulación high level, son las que permean en las esferas de lo privado. Lo transgresor es “hacer las cosas bien” y no “hacer como que hacemos las cosas bien”. Sé que parece muy simplista el utilizar la palabra “bien” para hablar de cuestiones tan complejas como los derechos del 50% de los habitantes del planeta, pero creo si volamos un poquito más alto sabremos de qué hablamos.

Imagen: culturacolectiva.com

¿Hace daño el espejismo? No hay nada de progre en parecer progre, pero ¿qué hay de malo en sólo parecerlo y no serlo? ¿Acaso hace tanto daño el macho declarado como lo hace el macho de closet? Sí, porque el macho progresista se ha instruido (superficialmente) en teorías feministas y tiene pleno reconocimiento en las esferas públicas y por lo tanto tiene poder para invisibilizar la violencia que ejerce en lo privado. Los dejo con esta analogía: ¿Qué es más peligroso, el lobo o el lobo disfrazado de oveja?

Pronta ingeniera, subversiva, crítica, defensora de las causas nobles y de los casos perdidos. Apasionada del expresso y del mezcal.