Venezuela. Otra vez Venezuela
@miguelmg28
Las preocupaciones del país transcurren con la trascendencia acostumbrada cuando, de pronto, la agenda mediática decide hablar, otra vez, sobre Venezuela. Una y otra vez el tema del pueblo venezolano debe ser estudiado y profundizado porque los medios hegemónicos creen tener el poder para crear una realidad que no es, con un dictador que no es y con crisis humanitarias que tampoco lo son. Siempre es cuestión de esperar días para que Venezuela vuelva a estar en las preocupaciones de los supuestos defensores de la democracia y los derechos humanos. Es inútil perder tiempo en enlistar a los personajes que suman esfuerzos para tumbar el gobierno de Nicolás Maduro, pero callan ante las necesidades y verdaderas preocupaciones que tienen lugar en su país.
Hace apenas una semana, sucedió lo que sucede desde hace 2 años: la camarilla conformada por 14 países llamado Grupo de Lima tuvo una reunión para abordar, nuevamente, los problemas que aquejan a Venezuela. Como es de esperarse, los miembros pertenecientes a este grupo conversan sobre lo más conveniente para resolver las problemáticas del país. El Grupo de Lima no es más que una respuesta a la Organización de Estados Americanos (OEA) para resolver las dificultades del único país del mundo con conflictos, complicaciones e inconvenientes: Venezuela. Algunos miembros del Grupo de Lima son: Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, México, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay y Perú. Además de contar con el apoyo de Estados Unidos, entre otros países.
El Grupo de Lima en una instancia que se creó el 8 de agosto del 2017 con un objetivo principal: buscar soluciones dialogadas y pacíficas a los acontecimientos de Venezuela. En la reunión del 4 de enero del 2019, 13 países de los 14 miembros decidieron firmar un acuerdo en donde se prevé sumar un número mayor de sanciones económicas y políticas al gobierno de Venezuela, además de desconocer el nuevo mandato de Nicolás Maduro que dio inicio el 10 de enero del presente año.
Pero hubo algo que alteró el orden de la agenda del grupo, de la cobertura mediática y de los intelectuales orgánicos: el único país que no firmó el acuerdo, el único gobierno que se abstuvo, fue el mexicano. La negativa vino del presidente Andrés Manuel López Obrador. Con esta acción, AMLO decidió optar por una política exterior basada en principios éticos y de no intervención. De esta manera, mostró que el respeto por la soberanía de otros países, la no injerencia y el no pronunciamiento sobre lo legítimo o ilegítimo de un gobierno, será la manera de ejercer la política exterior de México.
Así, al no haber firmado dicho acuerdo, López Obrador deja en claro que lo más importante para el desarrollo de un país es la política interior, ya que esto sirve como modelo a seguir para los demás países del mundo. La autodeterminación de los pueblos que desea implementar AMLO en su gobierno es un claro contrapeso a los intereses de los 13 países que decidieron firmar el acuerdo. Si bien en un principio el Grupo de Lima se creó con un fin en específico –resolver pacíficamente las problemáticas del país venezolano– lo cierto es que los objetivos se han desviado en cuanto a que ahora quieren conseguir los intereses que Estados Unidos busca en ese país.
Las palabras no son vacías, ya que no se trata de hacer declaraciones conspirativas en donde el acusado principal siempre sea EU, sin embargo, las palabras cobran peso cuando se consulta el documento redactado por el secretario de Departamento de EU, Mike Pompeo, el cual declara que el 2 de enero realizó una visita al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, con el fin de felicitarlo y reafirmar la sólida relación existente entre ambos países, además de fortalecer la cooperación para enfrentar los supuestos desafíos que tienen lugar en Cuba, Nicaragua y, sorpresivamente, Venezuela. El texto completo se puede consultar en el siguiente link: https://www.state.gov/r/pa/prs/ps/2019/01/288306.htm.
Estos supuestos desafíos a los que hace mención Mike Pompeo, en realidad cobran poco sentido si se analiza el panorama geopolítico en su totalidad. Los verdaderos desafíos a nivel mundial deberían girar en torno al peligro que representa el nuevo gobierno fascista que tiene lugar en Brasil con la llegada del presidente Jair Bolsonaro, o las represiones sociales que se llevan a cabo día con día en Argentina y Francia con los llamados chalecos amarillos. Así, el gobierno de Nicolás Maduro pareciera ser una “dictadura” muy particular que permite tener opositores que día con día pueden declarar en contra del presidente y sus políticas. En este sentido, pareciera que la preocupación principal de Estados Unidos –y de los 13 miembros del Grupo de Lima que firmaron tal acuerdo–, gira en torno al país con las mayores reservas de petróleo y energéticos del mundo. Curioso.
Un texto redactado por algunos miembros del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), realizó un análisis sobre lo que representa la firma de este acuerdo y la decisión tomada por el gobierno mexicano de no intervenir en asuntos de otros países. Además, el texto deja ver que Venezuela sólo sirve como un pretexto para ocultar los problemas políticos y económicos internos de los países que supuestamente están preocupados por el pueblo Venezolano. Aunado a esto, utilizan al gobierno de Nicolás Maduro como una referencia para “alertar” a los demás países del falso peligro de los gobiernos de izquierda en un contexto en donde la emergencia de estos está más que presente con la posible relección del presidente Evo Morales en Bolivia, la llegada de López Obrador en México y el nuevo mandato de Nicolás Maduro. El texto puede revisarse en el siguiente link: https://www.celag.org/grupo-lima-eeuu-disputa-geopolitica/.
Como cada cierto tiempo, la agenda mediática decide que se hable nuevamente de Venezuela. Hasta antes de la llegada de López Obrador a la presidencia, se dijo repetidamente que éste llevaría a México por los mismos caminos que Venezuela. Ahora Obrador ya presidente y se le ataca por decidir no intervenir en las decisiones del país con las mayores reservas petroleras del mundo.
Hay demasiados aspectos que se le pueden criticar a Venezuela –como a cualquier país del mundo–, sin embargo, es de gran reconocimiento lo hecho por el gobierno mexicano, porque con sus acciones evita contribuir al derrocamiento del régimen venezolano o al de cualquier gobierno del mundo.