“El Bronco” y el PRI: Cuando el régimen se desespera
@AlamBeav
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), ha caído en la desesperación, en plena campaña electoral ha cometido grandes y graves errores que le han impedido remontar en las encuestas, quedando hasta ahora en 3er lugar.
Empezando por su candidato, un hombre supuestamente alejado de las filas priistas, con el cual pensaron atraería el voto de los indecisos, confiados en que la ciudadanía creería en que José Antonio Meade es un “ciudadano independiente” de cualquier partido político, pero al mismo tiempo creyeron que al haber trabajado con gobiernos panistas, atraería el voto de estos.
Sin embargo, la estrategia les falló, pues dentro de las filas del tricolor no vieron con buenos ojos que alguien no priista fuera el candidato, teniendo otros perfiles que eran más aceptados por las bases como Osorio Chong o Luis Videgaray, priistas de cepa. Mientras que externamente, Meade no logró transmitir esa imagen de hombre autónomo, ni independiente y por el contrario se le acusa de ser parte de la corrupción priista, tan marcada en este sexenio.
Después el PRI buscó minar la candidatura de su competidor más cercano, Ricardo Anaya del PAN, para ello apostaron a dividir el voto blanquiazul, haciendo que Margarita Zabala, esposa del expresidente Calderón, con una larga y fuerte presencia en Acción Nacional, restara votos al joven queretano. Con esto hicieron que varios e importantes panistas quitaran su apoyo a Anaya y abandonaran las filas del conservador partido, si bien no le quitan gran cantidad de votos, si refleja una división interna del partido.
Por si fuera poco, las instituciones del Estado comenzaron una persecución contra Ricardo Anaya, primero mediante importantes medios de comunicación y después con las instituciones judiciales, lo cual levantó la indignación de amplios sectores, que cuestionaban el actuar de las autoridades y veían que las acusaciones de lavado de dinero tenían que ver más con un asunto político, que con un acto de justicia.
Y aunque Anaya comenzó a perder puntos en las encuestas, estos no se sumaron a los de José Antonio Meade, sino por el contrario, se fueron directos a la campaña de Andrés Manuel López Obrador. Las alertas del PRI comenzaron a buscar una nueva estrategia que pudiera restar votos al líder de MORENA, entonces han actuado sobre dos lineas.
La primera de ellas, ha sido comenzar una campaña de miedo que comenzó por parte de Javier Lozano, con el señalamiento de que López Obrador está siendo financiado por los rusos, algo que cayó en lo ridículo y que el tabasqueño tomó a risa. Por lo cual se han aventurado a crear una campaña mediática en los spots priistas, ignorando que la ciudadanía ha sido tan impregnada de las mismas en por lo menos las dos elecciones anteriores, que simplemente ésta ya no funciona, o al menos en la misma medida que sirvió en 2006.
Por lo que en la noche del lunes 10 de abril, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), decidió permitir que Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”, apareciera en las boletas, a pesar de que más de la mitad de sus firmas para participar como candidato independiente, tuvieron inconsistencias.
Las críticas a esta decisión no se hicieron esperar, las redes sociales acusaron de complicidad a los cuatro magistrados que aceptaron las violaciones de Rodríguez Calderón, los tacharon de traidores y de recibir línea de más arriba.
Y es que, “El Bronco” desde que arribó a la gubernatura de Nuevo León, se presenta como el candidato antisistema y al mismo tiempo su objetivo principal, ha sido criticar la candidatura de López Obrador. Sin embargo, la decisión del TEPJF (o en su caso del PRI-gobierno), puede ser una decisión errónea, que puede dejar más en claro la imparcialidad de los órganos encargados de vigilar las elecciones, dejando en duda la limpieza de las mismas y que podría catapultar aún más la candidatura del lider morenista.