Xóchitl Gálvez: la cruzada contra la prepotencia
Xóchitl Gálvez se ha convertido en una de las figuras favoritas dentro del Partido Acción Nacional (PAN), para competir por la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México el próximo año, esto a pesar de que la actual delegada de Miguel Hidalgo no se encuentra afiliada al partido azul.
La ingeniera en computación por la UNAM,de ascendencia otomí, incursionó a la política por invitación del entonces presidente Vicente Fox, ocupando el cargo de titular de la Comisión de Desarrollo de los Pueblo Indígenas. Desde 2012 se encarga de la delegación Miguel Hidalgo, cargo al que llegó por la postulación de Acción Nacional.
¿Pero qué ha hecho que Gálvez sea una de las favoritas dentro del PAN, para suceder a Miguel Ángel Mancera?
La personalidad de Gálvez contrasta con el grueso de los miembros del PAN, su humildad y sencillez; sus raíces indígenas y su carisma; pero sobre todo su forma de gobernar una de las delegaciones con un gran número de zonas exclusivas, como Polanco, Lomas de Chapultepec, Anzures, Bosques de las Lomas, etc. lugar emblema de los laydis y mirreyes.
A través del uso del Periscope, Gálvez ha dado a conocer sus tareas de gobierno, contra personas que se ufanan de tener “conocidos”, “palancas” e “influencias” en el gobierno, muchas de estas personas bautizadas en redes sociales como “lords” o “laydis”, han quedado al descubierto por su prepotencia.
Para el periodista Ricardo Raphael, los “mirreyes” ostentan su posición social, pensando que esta le dará inmunidad, valiéndose de la corrupción para acrecentar su poder económico y político.
Y es que en México la marcada desigualdad económica ha generado un sentimiento de rencor contra las clases pudientes, que en la mayoría de los casos salen impunes por sus actos. Es por ello que la postura de Gálvez, en cierta medida es llevar la justicia contra estos personajes que se identifican como hijos, hermanos, compadres de algún funcionario o empresario.
Como lo señala Raphael, la principal causa de corrupción brindada a estos grupos sociales, es por la fragilidad de las instituciones que se han visto superadas por los grupos de poder económicos y políticos, ante el temor de recibir represalias.
Entre los personajes que Gálvez y en su momento su City Manager, Arne Aus Den Ruthen expusieron, se encuentran Raul Liben Santiago -#LordMeLaPelas-, director del grupo periodístico Miled y cercano al presidente Peña Nieto, lo que provocó que unas semanas después Den Ruthen fuera “levantado” por los guardaespaldas de Liben y golpeado.
El Jefe de la Oficina de la Presidencia, Francisco Guzmán, ocupó con motos y camionetas un paso peatonal en Polanco, al ser cuestionado por de Ruthen, el funcionario negó conocer de quien eran los vehículos y se retiró caminando. Sin embargo, horas después a través de su Twitter Guzmán pidió disculpas.
En las Lomas de Chapultepec, un hombre impidió que de Ruthen alzara algunos bienes mostrencos que impedían la libre circulación y enseguida se comunicó con Meyer Klip, director del INVEA del gobierno capitalino, quien hizo distintas llamadas -entre ellas a Gálvez-, para impedir que su amigo fuera presentado al Juzgado Cívico.
Lo anterior llevó a que días después, un edificio propiedad de la familia de Ruthen, fuera clausurado por el INVEA, lo cual calificó como una venganza por parte de Meyer Klip.
La cruzada de Gálvez contra el tráfico de influencias, la prepotencia y la impunidad, la ha convertido en un personaje que busca acabar con estas prácticas que se encuentran muy arraigadas en distintos grupos sociales y que son un lastre para la sana convivencia.
Cabe señalar que pesa a la fobia que se tiene dentro del PAN al partido MORENA, que encabeza Andrés Manuel López Obrador, por representar un proyecto político distinto, Gálvez se ha sumado al grupo de delegados de Regeneración Nacional, para “trabajar en equipo, en beneficio de los ciudadanos”, lo cual ha levantado molestias en el PAN.