Caso Felipe Oliva, presunto violador
Crónica de un Nosotros Hacemos Teatro al “Nosotras Te Denunciamos Felipe Oliva”
Nayeli Pérez
El domingo 29 de mayo de 2016, al término de temporada de la obra “Médico a Palos” de Nosotros Hacemos Teatro A.C., presentada en el teatro Enrique Lizalde, se desarrolló una movilización feminista en contra del director de la asociación civil y de la obra Felipe Oliva, quien de acuerdo con las manifestantes violó, acosó y hostigó sexualmente a distintas estudiantes de artes escénicas a lo largo de quince años.
Lo que se vivió al interior del teatro tomó por sorpresa al público, pues tras una escena donde el citado director y actor interpretaba a un marido golpeando a su esposa, de la oscuridad del público un grupo de mujeres gritaron al unísono: ¡Mentira! Tras este episodio, las mujeres que cubrían sus rostros con máscaras blancas, alusivas al arte dramático, siguieron gritando consignas como: ¡Felipe Oliva Violador!
La reacción del público era confusa, pues los actores en escena continuaron sus diálogos por un momento y parecía que la agitación de estas mujeres con máscaras blancas era parte del espectáculo, ya que recordaba a un coro griego. No obstante, la realidad irrumpió cuando se detonaron las primeras agresiones físicas y verbales contra las manifestantes por parte de algunos asistentes quienes las empujaron, les gritaron que se fueran y, entre otras cosas, amenazaron con violarlas. Al mismo tiempo, las puertas del teatro se cerraron, nadie podía entrar, ni salir del recinto, todo sucedía en la penumbra.
Por otra parte, se escuchaban tambores y canciones al exterior del teatro, se escucharon gritos de repudió hacia Felipe Oliva y otros que exigían la entrada al recinto, pues temían por la seguridad de las manifestantes que se encontraban en el interior. Después de unos momentos, las manifestantes entraron cantando consignas y se montaron sobre el escenario, denunciando al director, quien no salió en ningún momento a escena. Mientras tanto, el público comenzó a salir por los pasillos, algunos preguntaban qué sucedía, otros aplaudían a las manifestantes, otros más salieron en silencio y otros se quedaron en el interior.
Tras la salida del público, las manifestantes también salieron del teatro y avanzaron sobre la avenida al ritmo de tambores al tiempo que comenzaba la lluvia. La pregunta y la respuesta a un ¿Por qué? Se explica a la luz de la movilización del #24A (24 de abril), cuando cientos de mujeres protestaron en el país en contra las violencias machistas, pues la situación en México es insostenible por los 7 feminicidios al día, porque 9 de cada 10 víctimas por violencia sexual son mujeres (CEAV, 2016), por el aumento en la CDMX a 300 violaciones sexuales al año utilizando narcóticos (Riepl, 2016) y un sinnúmero de situaciones que están minando la vida, la libertad y los derechos de las mujeres y las niñas.
El #24A está gestando más movilizaciones, como: las Cruces en Chimalhuacán, las asambleas de estudiantes universitarias para denunciar la violencia de género o el escrache contra Felipe Oliva. Dichas acciones sociales son como los dedos de la mano, diferentes entre sí, no obstante, si algo llama la atención de la protesta contra este director de teatro, es que —quizás— esta fue la primera movilización donde las mujeres manifestantes fueron violentadas físicamente.
CEAV. (2016, Marzo 14). CEAV presenta Diagnóstico Nacional de Atención a Víctimas de Violencia Sexual. Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas [En línea] Recuperado 30 de mayo de 2016, de:
Riepl, M. (2016, mayo 20). De Argentina a México: el invisible y descontrolado uso de “drogas de la violación” en América Latina. BBC Mundo [En línea] Recuperado 30 de mayo de 2016, de:
