Les dan dos minutos a padres de normalistas en Ginebra

Kenya Atenas Lizárraga y Samanta Limón

La exigencia de justicia por la desaparición de 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa sigue vigente. Los padres de familia que fueron a Ginebra a exponer su caso en el Comité de Desapariciones Forzadas de las Naciones Unidas, revelaron, en entrevista para Consideraciones, que sólo les dieron dos minutos para explicar lo que había pasado con sus hijos. Mientras que a los representantes del gobierno se les dio más tiempo y más días para presentar un informe.

Lamentaron también la poca ética por parte de las autoridades, la falta de información de los peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) y los intentos de su titular, Jesús Murillo Karam, por cerrar la investigación, lo que muestra, según dijeron, la irresponsabilidad e irregularidades del Estado Mexicano sobre el caso.

Ante la comunidad de la Escuela Nacional de Antropología e historia (ENAH), el pasado 13 de febrero, Agradecieron el apoyo de la sociedad y exigieron al Estado decir la verdad y no sólo hipótesis, pues hasta ahorita –afirmaron- no hay ningún elemento para cerrar las pesquisas.

Pidieron que el caso de sus hijos desaparecidos no se vuelva a repetir; el objetivo principal de sus visitas a Escuelas, Instituciones, Universidades y estados –señalaron- es difundir la información e invitar a toda la sociedad para que el gobierno los escuche  y no apliquen “cortinas de humo.”

El padre de César Manuel Gonzáles Hernández señaló que en tan sólo cuatro meses aprendió más de sus 50 años de vida, pero esto lo hizo con un dolor insoportable.

“43 vidas nos han costado muchas lágrimas, y los vamos a recuperar. Nos han ofrecido dinero, pero nuestros hijos no están en venta. Este dolor no se lo quiero compartir a ninguno de ustedes, por eso estamos luchando para que este México cambie.”

Durante el diálogo, los padres de familia indicaron que las declaraciones del procurador son totalmente falsas, ya que ellos siempre estuvieron en contacto con el Equipo Argentino de Antropología Forense, quienes afirmaron que en todas las declaraciones y resultados que el gobierno daba a conocer nunca estuvieron presentes, ni siquiera cuando se anunció la bolsa negra con la cenizas de los desaparecidos.

Los estudiantes de Ayotzinapa exigieron que se cumplan los derechos que están establecidos en la Constitución, principalmente el Articulo 3° y 6°, también declararon que sus argumentos no son escuchados por el gobierno, a pesar de que son testigos y víctimas de los ataques del batallón 27 del Ejército. El Procurador de la Republica lo niega y de facto elimina sus testimonios

Señalaron que su único delito es ser pobres y campesinos “lo único que exigimos es la aparición con vida de nuestros hijos”.

Admiten que el gobierno los ha querido comprar con dinero y despensas pero ellos no aceptan ya que buscan la aplicación de la ley. “Fuera un hijo de él que estuviera desaparecido ya hubiera movido cielo, mar y tierra”- concluyó Don Rafael López, padre de Julio César López Patolzin.

Fotografías: Samanta Limón y Alan Peralta